El Aborto de Lucia Historia de Terror

El Aborto de Lucia Historia de Terror

Mi nombre es Lucía les quiero contar mi historia. Iba a cumplir 15 años, estaba muy emocionada por qué mis padres me harían mi fiesta todo iba perfecto, faltaban tan solo unos días El Aborto de Lucia Historia de Terror. Pasaron los días y llegó el momento de mi fiesta, todo iba fenomenal, hasta que de pronto se acercó un chico muy guapo, me felicitó me dio un regalo, quedé muy emocionada por aquel muchacho tan hermoso, todo estaba marchando genial, se terminó la fiesta. Al día siguiente empecé a ver mis regalos con mis padres y mi hermanita menor, cuándo me tocó abrir él regalo de aquel chavo, mi corazón se aceleró, la emoción invadía mis entrañas, él regalo era muy hermoso, era un bello corazón en una cajita, en la parte inferior había una nota, no lo quise leer, por qué mis padres estaban conmigo, después de abrir todos los regalos, me dirigí a mi recámara para acomodar todo lo que me habían regalado. Me senté en mi cama y volví a ver, él regalo de aquel chico, la nota decía: TE REGALO Mi CORAZÓN CON AMOR EMILIANO, quedé muy emocionada, por qué no recordaba de dónde lo conocía. Llegó el lunes y tenía que ir al colegio, llegué al salón y baya la sorpresa que me di, estaba ahí, si ahí sentado en mi cubículo, me quedé paralizada de la emoción, no podía creer que era mi compañero de clase, él se acercó y me dio un beso en la mejilla, mi corazón de nuevo quería salirse del pecho, él me sonrió, tomó mi mochila y la llevó al cubículo. Llegó la profesora, pero no podía concentrarme, Emiliano me encantaba, me decía a misma me he enamorado. Llegó la hora del receso, nos pusimos a platicar, él me invitó una nieve, todo era perfecto, tocaron el timbre para entrar de nuevo al aula. Después de unas horas terminaron las clases, él me dijo que me acompañaría a mi casa, por supuesto acepté rápidamente. Nos fuimos platicando, reíamos sin parar, era mi gran amor. Pasaron los días, él era muy atentó conmigo, cada día me enamoraba más de él, estaba realmente ilusionada, por aquel chico tan perfecto. Pasaron los meses, hasta que de pronto, me pidió que fuera su novia de la manera, más linda y tierna. Por supuesto le dije que SÍ. Todo era especial, era muy atentó, cariñoso, me enamoraba con sus detalles cada día. Llegó el día que cumplimos un año de novio, él me preparó una reunión con los amigos más cercanos, todo era sensacional. Luego se retiraron uno a uno nuestros amigos, quedamos completamente solos, después me dijo que cerrará los ojos, por qué tenía una última sorpresa, mi corazón se aceleró. Me tapó delicadamente los ojos, él me iba guiando para no caerme, di algunos pasos, de pronto me dijo, que quitaré el trapo de los ojos cuándo de pronto mis ojos se descubrieron, todo era hermoso, estábamos en el patio de su casa, era un lugar especial para los dos, puso música tranquila, bailábamos, comimos fresa con chocolate, todo iba perfecto, sabía que ese momento me entregaría a él. Pasó lo que tenía que pasar, fue realmente hermoso, para los dos, era nuestra primera vez, después me acompañó a mi casa. Al día siguiente me tocaba ir al colegio, él como siempre muy atento y amoroso. Todo iba tan perfecto, cuando de pronto me empecé a sentir mal, tenía náuseas, mareos. Él me consentía en mis malestares que tenía. Después de unos días, al salir del colegio, nos dirigimos a mi casa, cuando de pronto me empecé a sentir muy mal, él me llevó con un tío de él, que es Doctor, me hizo muchos estudios. Llegó con algunos resultados de mis estudios, él se veía muy preocupado, los nervios nos estaban matando. Cuando me entrega una prueba de embarazo, decía: POSITIVO. Me desmayé, pasó un rato, desperté, él estaba hablando, tocando mi vientre, estaba muy emocionado por qué sería papá, en cambió yo estaba abrumada, aterrada por aquella noticia, no sabía cómo iba a reaccionar mis padres. Él me dijo que sé haría responsable de nuestro bebé, estaba realmente emocionado. Pasaron los días, no tenía la forma de decirle a mis padres que estaba embarazada, él me dijo que se lo diríamos juntos. Llegó el momento y hablamos con mis padres que estaba embarazada, ellos muy molestos me empezaron a regañar, a insultarme, que le daba vergüenza en tenerme como hija, a él lo corrieron de la casa, le dijeron que jamás se acercaría a mí, y que la escoria que llevaba en el vientre no tenía que nacer. Quedé impactada por aquello que dijeron, él se fue, corrí llorando a mi recámara. Le hablaba a mi bebé, le decía que lo amaba sin conocerlo, era producto de un inmenso amor que nos teníamos su papi y yo. Lloré tanto que me quedé dormida, después de un rato me despertaron los gritos de mis padres, ambos se echaban la culpa de mi error, ellos decían que no nacería mi bebé, que era una aberración, qué todo mundo lo iban a señalar que la sociedad podía enterarse, corrí de nuevos mi recámara, me acariciaba el vientre, ya amaba a mi bebé, después de unos minutos, una llamada inesperada, era él, mi amado Emiliano, tendría un plan para que no, nos separan y nos dejarán tener al bebé, nos íbamos a fugarnos juntos, él tenía todo preparado para irnos el fin de semana, de nuevo mi alegría regresó a mí, le hablaba a mi bebé que pronto estaríamos con papi. Pasaron dos días mi madre me dijo que teníamos que ir al Doctor para ver cómo estaba el bebé, que me apoyaría con el embarazo, que había aceptado mi estado, estaba muy emocionada por eso, que acepté en ir con ella, llegamos aquel hospital, al entrar sentí escalofrío, solo pensé que era los nervios, esperamos un rato y luego pasamos con el doctor, nos dijo que iba bien el embarazo que tenía un mes mi bebé, luego me pasaron a un cuartito, donde me iban a poner unos medicamentos para ayudar al bebé, eso se me hizo extraño, pero mi madre estaba conmigo, entonces no dudé en lo mínimo, pasaron unos minutos empecé a sentir me mareaba, le dije a mi madre que estaba pasando, lo último que escuché, es por tú bien, mi niña. Cuando desperté estaba algo aturdida no entendía que estaba pasando, solo miré alrededor estaba acostada, me tenían suero y unos aparatos en el cuerpo, sentía un vacío y dolor en el vientre, empecé a gritar y me quité todos los aparatos que tenía en mi cuerpo, grité, grité en eso entró mi madre y pregunté qué es lo que estaba pasando,
mi madre respondió tu problema está resuelto, ese bastardo ya no existe, empecé a llorar y a gritar ¡Mi bebé¡ ¡Mi bebé ¡yo lo amó, yo te amó mi bebé, mami te ama muchísimo, que hiciste madre, me arrancaste a mi bebé, te odió madre, en eso llegaron los doctores y me pusieron un sedante. Pasaron los días, no comía, no dormía y me la pasaba llorando todo el tiempo, por las noches en los ratos que me dormía, me despertaba las pesadillas que me atormentaba cada día. Le conté lo sucedido a Emiliano, él lloraba por la noticia, mi tristeza cada día era peor, hasta que de pronto una llamada lo cambió todo, me marcó Emiliano me dijo qué me amaría por siempre y que pronto estaría
con nuestro bebé, cuando de pronto escuché un disparo, empecé a gritar su nombre con desesperación, nadie me respondió, entendí qué había perdido a mi bebé, y al amor de mi vida. Empecé a bajar de peso, mis padres estaban preocupados e intentaron llevarme al Doctor, pero cada vez qué me hablaban me llenaba de odio, terminaba insultándolos, y corría a mi cuarto a llorar, la tristeza invadía mis entrañas. Hasta que una noche escuché un ruido en él baño, me asuste un poco, pero agarré valor averiguar que era, sentía un escalofrío y los nervios me estaban matando, cuando de pronto un reflejó de un pequeño cuerpecito estaba en él baño, el cielo tronaba, comenzó a llover con más fuerza, mis gritos de agonía nadie lo escuchaba, no podía creer que mi bebé estaba ahí mirándome y juzgándome por el error que cometió mi madre, le decía mi bebé yo te amo, tu abuelita me quitó la oportunidad de tenerte en mis brazos, él cuerpecito comenzó a caminar hacia mí, arrastrando por el suelo el cordón umbilical y manchando el piso de sangre, solo quería que me abrazaras y me llenaras de besos, cada vez gritaba con más fuerza que no era mi culpa, él solo se acercaba cada vez más a mí. ¡No pude más salí corriendo con lágrimas en los ojos, con unos gritos de agonía, corrí en medio de la lluvia, llegué a una bodega, mis ojos iluminaron un viejo machete, grité con todas mis fuerzas Te Amo Emiliano, pronto estaremos con nuestro bebé, nos amaremos por toda la eternidad, corté mis venas de ambas manos, poco a poco mis fuerzas se iban de mi cuerpo, a lo lejos vi a mi bebé y a mi amado qué se acercaban a mí, los dos me abrazaron, Emiliano me dijo ahora sí estaremos los 3 para toda la vida!!!.
 
Autor: Anónimo
Derechos Reservados

Share this post

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


Historias de Terror